Cuesta acostumbrarse
a nuevas etapas
no queriendo enamorarse
de tantas horas pasadas.
Dudando si esto es real
piensas parece un sueño
vivencias del momento
de una soledad sepulcral.
Y se evitan las tentaciones
de extender el brazo prohibido
conteniendo emociones
de tanto y tanto compartido.
Acostumbrarse cuesta...
Si, cuesta acostumbrarse.
Copyright Fini López Santos (2012)
precioso, y precioso blog un abrazo
ResponderEliminarGracias por tu comentario y por pasar por mi rincón.
EliminarUn abrazo.