martes, 30 de marzo de 2021

La vida


Reto mes de Marzo con Ginebra Blonde

Mosaico nº 13


Toc toc toc...alguien llamó a la puerta.
No esperaba visita alguna y se sobresaltó desparramando su te de jazmín.
Se acercó a la puerta y contestaron desde fuera…
¡Policía!
- ¿Se puede saber que ocurre para molestar a estas horas?
Perdone señora, alguien la anda buscando hace algún tiempo y por fin dimos con su paradero 
¿Está bien?
- Perfectamente, gracias.
Después de aclarar que nadie la retenía y que no era su intención volver, se despidió no sin antes advertirles, que mantuvieran su paradero como desconocido.
No sabría decir el momento exacto en el que se convirtió en arte del paisaje otoñal, se ausentó de la gran urbe dejando tras ella todo lo que hasta ese momento le hizo feliz. Desde que visitó aquel faro antiguo todo cambió.
Conocer a su morador fue la luz que buscó durante años y recordó el estanque que amó de pequeña y los inviernos lluviosos que todo lo anegaban y los caminos se hacían intransitables.
Tomó un par de maletas, se subió al coche y tomó rumbo a su paz interior.
Nada dijo a nadie, tan solo se llevó una pequeña tableé y un teléfono antiguo para una
emergencia y libros, muchos libros.
Caminó entre las hojas muertas de color dorado y subió a la cumbre para divisar las nubes 
escuchando sonidos olvidados, hasta le pareció escuchar la voz de su padre, sus ojos brillaron 
con intensidad, se sentía bien.
Se dejo abrazar por aquel colchón de lana mullida al que le gustaba volver de tarde en tarde, aquella noche Olga se dio un baño de velas, incienso y flores secas con olor a otoño y comenzó su nueva vida.
La noche era cálida, se despojó de todo y salió al exterior, se mezclo con el crujir de las hojas secas y recordó alguna secuencia de su película favorita…

(En el estanque dorado).
-Muchacha, ¿Qué haces aquí a estas horas de la noche?
- Norman, viejo bobo del demonio.
Desde que su padre le regalo el libro, siempre está en su mesita de noche.
-La vida continúa, Chelsea, te sugiero que camines con ella.

Copyright Fini López Santos