Cuántas veces te vi, solitario, ausente
vagando en el tiempo, recibiendo sablazos
y quise rodearte en mis brazos
para entregarte mi amor sin esconderte.
Cuántas veces te vi, llorar de impotencia
con ese odio tanto tiempo escondido
y quise ser culpable de tú rabia
para qué pudieses desahogarte conmigo.
Cuántas veces quise de ti beber
cada lágrima derramada
sorber la pena qué te hace enloquecer
y dejarte limpia y pura el alma.
Cuántas veces quise ser brisa
andar juntos los senderos del destino
ser yo quién susurre a tú oído
palabras de amor y dicha.
Cuántas veces te vi, contento, radiante
animado y feliz, ¡como un milagro!
y tuve qué morder hasta sangrar mi labio
y tragar mi orgullo para escucharte.
Cuántas veces quise amarte hasta lo imposible
con el orgullo de haber nacido para ti
entregándote mi amor indisoluble.
Copyright Fini López Santos (2012)
SUBLIME !!!!
ResponderEliminarMil gracias!
ResponderEliminarBesos.