Foto de la red
Ensimismado en tus papeles, integrado en
el pequeño espacio del que, ya sois uno mismo,
no percibes mi llegada a tu reino.
Pero ya es un rito... es la hora.
Necesitas de mis laureles, sí, el premio
a tu persona que tan gratamente te entrego.
Mi cuerpo se estremece con el aroma que tu
piel desprende con total provocación. Llego
por tu espalda atesorando hasta el aire al
caminar, para que no percibas el más mínimo
resquicio de mi presencia.
Y es que no puedo tenerte distante de mí.
Descanso mis manos en tus hombros desnudos,
al unísono mi boca se posa en la ladera de tu cuello
provocadoramente sensual y siento latir la aorta
sin compás, ni freno... te acelero.
Te vendrá bien el masaje y como cada tarde
desde hace ¿cuánto tiempo? Que importa, si
mis dedos son adictos a tu piel... comienza el
rito a la señal de tus palabras que ya, ni escucho.
Ummm... tardaste, me dices reposando tu
cuerpo en el respaldo ya desgastado por el uso
dejando inertes los brazos, abandonándote a mi.
Uncí mis manos a tu espalda como si de una yunta
se tratara tornándose inseparables, ungí de
aceites el camino a mi paso y recorrí cada
centímetro del bancal de tu cuerpo, aré
derrumbando márgenes, alisando terrenos.
Y absorta en sentir de tu sangre el fluir,
llegué al éxtasis en sueños inimaginables.
Eres tú mi fantasía, soy yo tu adición, te giraste,
se adueñaron nuestras bocas de labios y lenguas
en degustación. Se paró el tiempo.
Y fuimos pócimas de un rito desenfrenado.
<3 :-)
ResponderEliminarGracias. :-) <3
EliminarTREMENDAMENTE SENSUAL
ResponderEliminarGracias!
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