Tú habla yo te amo: enero 2012

domingo, 29 de enero de 2012

Tu regalo

Foto de la red

Yo no quiero tu cuerpo,

quiero tu musicalidad y tu armonía.

Porque siempre existes en mis caricias

en el beso no dado, pero siempre buscado.

Porque me quemas en imposibles fuegos

cuando me miro en tus ojos.

Yo no quiero tus besos,

quiero tus labios, en mi boca desgarrada.

Porque mandas con tus palabras,

lanzas envenenadas.

Porque envuelves el mundo en tu silencio

y feliz lo llenas de lunas y deseos.

Yo solo quiero para siempre, sólo,

ese color miel de tu tristeza.

Porque soy tu regalo

en abrazos envueltos.

Porque mi piel llenas

de pasiones eternas.

jueves, 26 de enero de 2012

Recuerdo como me gustaba mirarte...
Me sentaba en el banco más próximo para que no sospechase mi admiración
hacia el y disimuladamente le veía hacer su trabajo, pantalón negro y camisa
negra con ribete naranja en los hombros y en el corazón…su chapa identificativa.
Era una forma de mostrar orgulloso que podía hacer su trabajo sin miedo a
represalias…eran principio de los setenta.
Yo no tenía mas de doce años y escuchaba como algunas se mostraban orgullosas
de correr delante de los grises después de provocarlos y vi mas de una vez correr
con el pequeño maletín abrazado al pecho para no perder su herramienta de trabajo,
a algún que otro chaval que se acercaba a los profesionales para ver hacer su trabajo
y aprender el arte de sus manos.
Era bueno…muy bueno, tenia magia en las manos…parecían volar alrededor de su
objetivo, su destreza las hacia desaparecer y aparecer con la satisfacción de quien
sabe su trabajo bien echo.
Intuyo que siempre supo de mi admiración, hoy con los años, pienso en la cara
bobalicona que tendría yo cuando lo miraba por el rabillo del ojo y lo descubría
mirándome con una sonrisa.
Creo que desde entonces siento predilección por esa parte del cuerpo, es en
lo primero que me fijo sea hombre o mujer, no importa sean jóvenes o no,
grandes o pequeñas, me gustan unas manos limpias, bien cuidadas…jamás se las
vi manchadas a Lolo, así le llamaban y después también yo y me jure que un día
estaría sentada allí y sería la protagonista de aquella historia de adolescente.
Pasaron los años y un día me senté en la silla de la cafetería, donde se sentaba la
gente importante y le dije: ¿Podría? Me miro divertido y con un simple gesto me dijo
que si…volaron los minutos, cuando le pregunte por el importe de tu trabajo me
sorprendió con una reverencia, un beso en la mano y con aquellas palabras que
guardo muy dentro...Estoy pagado con tu visita.
Hoy te recordé como tantas veces, una mañana no acudiste a tu punto de trabajo…
la explanada estaba desnuda sin ti, nunca mas supimos de tu paradero.
Va por ti Lolo…mi limpiabotas preferido.

Copyright Fini López Santos

Madrugada

Foto de la red

Te amo porque conmigo
fuiste generoso de tu tiempo
comenzando por los sueños
que estaban casi dormidos.

Madrugada en mi corazón
sin son, temeroso bailando
cómplice del sentido
cuando se pierde la razón.

Me deleitan tus silencios
porque ponen magia al sonido
el ambiente sabe a rocío
y huele a jazmines florecidos.

Cómplice madrugada de estío,
de este amor tan solo mío
que tras la sombra escondido
conoce mis más íntimos latidos.

Soy como aquel altivo junco
que mece con brío la tormenta
en la triste madrugada
de este sin vivir eterno.

No amanezcas madrugada
sé bien lo que digo
déjame seguir soñando
no le cuentas a nadie
que su amor me cubre del frío.

miércoles, 25 de enero de 2012

Tu Dulcinea

Corrieron mis lágrimas llenas de tristeza...de soledad…
luchando contra lo inexplicable…lo irrazonable…
y me deje llevar sintiendo que formaba parte de ti,
de las imágenes que contigo viví.
Sentí la tibieza de sus aguas cristalinas...el furor de sus
susurros al romper las olas contra las rocas junto a
la rabia de mis palabras…y sentí el frío de las montañas
nevadas…junto a la libertad que regalan sus cimas blancas.
Sentí el embelezo de las auroras boreales…me llene de
atardeceres tan bellos como el alba…y se helaron mis
venas en los bancos de aquel parque.
Me deje llevar por tus brazos en aquel vals interminable
subida en la punta de tus zapatos…y en aquel momento
fui princesa para tu corazón roto…galeno para tus heridas
de muerte…tu lo sabías!
Sigo con la rabia contenida al no entender tu partida…
y recordé tus últimas palabras dichas sin importancia.
Salí de mi coraza dejándome empapar por la lluvia a
lomos de Rocinante…y como elixir divino…limpiose
cualquier resquicio de pena acumulada.
Hasta mi vendrás mi quijote…envuelto con las olas
que arrastran la arena a la orilla de mi playa.

Fotos de la red

Tu nombre...

Foto de la red

Aquella tarde…como tantas otras
en la esquina de la calle nueva
me llene de lluvia en primavera
con olor a tierra y a semillas.

Como cada tarde desde antaño
supe el desaire de tu olvido
y se me escapa un suspiro
por penetrar en tu sueño.

Como cada tarde espero
tras la fría y triste ventana
escuchar de tu voz un susurro
que despierte mi alma.

Aquella tarde…como tantas otras
la mar me trajo tu aroma
y en sus aguas en calma
tejen tu nombre las gaviotas.